El Instituto Nacional de Migración (INM) atendió este sábado a los miles migrantes que salieron ayer de Tapachula, Chiapas.
Al cumplir con la demanda de tramitar permisos temporales para transitar por el País, el avance de la décima caravana fue frenado.
La madrugada de este primero de julio, un contingente de al menos 3 mil 500 indocumentados, en su mayoría venezolanos, partió del Parque Bicentenario de Tapachula rumbo a la aduana de Cerro Gordo ubicada sobre el tramo carretero Huixtla-Villa Comaltitlán.
Ahí, con la queja de que los trámites en territorio nacional habían sido lentos, exigieron de nueva cuenta la documentación necesaria para poder desplazarse por la vía legal y sin riesgos en México.
Las autoridades mexicanas atendieron la exigencia y en grupos van pasando los migrantes para realizar el papeleo.
Mientras, al exterior de esa sede, los interesados acampan en espera de recibir los papeles que les permitan la estancia temporal.
De acuerdo con informes, han sido al menos 2 mil los permisos tramitados hasta este día que se espera sean entregados en los próximos días.
El documento que se les imprimirá tendrá una vigencia de 30 días a partir de la expedición.